Los cruces de play-offs del torneo de Clausura 2024 del fútbol formativo
Geraldine Molina 
De Grange se desmarcó de la toma de decisiones; allí aseguró que la poda se debe al proyecto deportivo que encabeza Ángel Hualde. También a la reducción de plantel que pidió el directorio de la UC.
En el marco de la polémica debido a la salida de 17 jugadoras de Universidad Católica, Helaine de Grange, subgerenta del fútbol femenino de la UC, dio sus explicaciones. La directiva cruzada aseguró que ninguna futbolista dejó el club debido a su apoyo a la huelga o a favoritismos.
En la conferencia de prensa de presentación de Emilia Pastrián, De Grange aseguró que el arribo de la mediocampista es porque “para 2023 tendremos algunos cambios que buscan mayor competitividad para mejorar los resultados que estamos persiguiendo”.
La dirigenta afirmó que, los despidos, tienen una razón de ser. “Las decisiones de conformación de plantel obedecen a una reestructuración deportiva. Estamos buscando con este proyecto, que sabemos que es difícil y largo, de largo plazo, aumentar la competitividad, ir mejorando año a año”, explicó.
“Tenemos ciertos objetivos deportivos para el 2023, pero quiero recordar que el club hace un año inició el camino y el proyecto para convertirse en un equipo de vanguardia, ojalá en el mejor equipo de Chile de aquí a cinco años. La pregunta en torno a quienes están hoy en el plantel quizás no es la más importante, sino quienes necesitan estar”, agregó Helaine.
De Grange descartó que las jugadoras que se quedan es porque son amigas de ella, sino por su rendimiento. “Para lograr ese objetivo necesitamos contar con los y las mejores, por lo tanto, aquí no hay decisiones personales ni asociadas a huelgas o amiguismos ni nada. Son decisiones deportivas basadas en rendimiento, técnicas, tácticas y deportivas que obedecen al modelo que vamos a buscar en 2023 y que responden al modelo que trae el nuevo entrenador”, añadió.
Además, aseguró que la decisión fue de los dirigentes de la UC. “Cabe aclarar que hay una decisión de conformar el plantel; históricamente, Católica ha tenido planteles de 30 y hasta 35 jugadoras entrenando. Las bases del torneo permiten 30 jugadoras inscritas. La primera decisión mandatoria desde el directorio, que es como opera el fútbol masculino, es que los planteles no superen las 23 o 24 jugadoras”, manifestó.
De Grange explicó, por otro lado, que el análisis de rendimiento lo realizaron empresas externas al club. “El primer movimiento decidido fue acortar el plantel. Dicho esto, evaluando la temporada y con un análisis hecho con profesionales de big data y rendimiento analítico, más las evaluaciones del año y de la temporada 2021 también. Decidimos que había seis jugadoras que por motivos deportivos no iban a continuar”, puntualizó.
“Hubo otro grupo que sí dejamos sujeto a una evaluación del nuevo entrenador, que ya está haciendo ese trabajo. Durante la próxima semana tendremos conversaciones con esas jugadoras y la idea es que parte de esas jugadoras se mantengan, porque queremos que sigan. Habrá otras jugadoras que dependiendo de su perfil puedan o no cumplir con la visión del entrenador”, sentenció. Todo apunta a que ellas dejarán la UC de todos modos.
Foto: Cruzados
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