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Geraldine Molina 
Desde la suspensión de los torneos en 2019 que no hay fútbol de ascenso en Chile. Durante 2020 no regresaron a las canchas, ni les autorizaron la vuelta a entrenar. En 2021, todavía no tienen fecha tentativa para el inicio del certamen. ¿Cuándo volverá la B?
El Campeonato Nacional de Primera B en Chile está suspendido hace 17 meses, y todo indica que aún le faltan, al menos, cuatro meses para volver. Fue en octubre de 2019 la última vez que jugaron, y aunque la Primera División regresó y ya tiene fecha para el retorno en 2021 (17 de abril), la división de plata no la tiene.
La Primera B nace en 2019. Hasta 2018, eran 26 los equipos que participaban en la división de oro. Pero la ANFP, con el afán de profesionalizar la Liga, aunado a la exigencia de que todos los clubes que participaran en la Primera B masculina tuvieran una rama femenina, decidió crear la segunda categoría. Todo esto a partir del año siguiente.
12 instituciones descendieron y otras cuatro -nuevas- dijeron presente en la primera edición del certamen, según las exigencias del reglamento. Sin embargo, este nunca llegó a término. El campeonato de ascenso fue suspendido dos fechas antes del final, dos clubes subieron pero no hubo descensos, y nunca más volvieron a jugar. El estallido social impidió la vuelta del fútbol y la Asociación Nacional determinó que la B quedaría tal y como estaba.
Nada hacía presagiar que en 2020 tampoco podrían jugar. El torneo tenía su comienzo previsto para abril, pero la emergencia sanitaria por covid-19 provocó la postergación de la primera fecha, que finalmente nunca fue programada. ANFP flexibilizó las exigencias a los clubes masculinos, y aumentó los protocolos sanitarios para la vuelta a los entrenamientos, lo que provocó que, durante el año, la B quedara marginada.
Y aunque la Primera División Femenina sí pudo volver a las canchas el año pasado, consideraron que la B no era necesaria y no regresaron, dejando a cientos de jugadoras a la deriva, entrenando por Zoom durante meses, y con sus clubes eliminando de raíz la inversión -bajísima- que habían hecho en ellas.
¿Cuál es la situación en la actualidad?
Varios clubes de Primera B Femenina han regresado a las canchas y Coquimbo Unido es uno de ellos. No obstante, Ñublense y O’higgins alegan que no les permiten entrenar de forma física. Huachipato y Unión Española reclaman que la rama masculina ya está jugando torneos internacionales, pero que ellas ni siquiera tienen fecha para una primera práctica presencial. Entre otros.
La ANFP no ha entregado mayor información. Sin ir más lejos, todo lo que se sabe de la vuelta del Campeonato Nacional de Primera B 2021 ha llegado de boca de terceros. Mayormente, de gente que trabaja en clubes y ha leído las circulares que la Asociación manda a las respectivas directivas, pero ellos no se han pronunciado.
Hoy viernes 19 de marzo, durante la tarde, hubo Consejo de Presidentes, y se espera que continúe el próximo miércoles 24. ¿Primer tema en tabla? “Aprobación de las bases del Campeonato de Primera División del Fútbol Femenino, temporada 2021”. ¿Y la Primera B? Nada.
Lo que se sabe, según fuentes cercanas a los clubes, es que de la División de Honor habrá cuatro descensos a fines de 2021, dos de cada grupo -ya que el torneo completo estará dividido en dos grupos de ocho equipos-. Además, dos clubes de la Primera B ascenderían.
El torneo de Ascenso sería uno de Transición, que comenzará a principios del segundo semestre y que durará alrededor de cuatro meses. La excusa, según reveló el periodista Alfonso Bastidas en su cuenta de Twitter, es “un tema de condiciones y conformación de sus categorías en comparación con los demás clubes de dicha división. En pocas palabras, ‘que aún no están listos’“.
En teoría, son 18 los clubes que se espera que digan presente en Primera B Femenina este año, respecto a los que participarían en 2020. AC Barnechea, Cobreloa, Coquimbo Unido, Curicó Unido, Deportes Copiapó, Deportes Melipilla, Deportes Santa Cruz, Deportes Valdivia, Huachipato, Magallanes, Ñublense, O’Higgins, Rangers, San Luis de Quillota, San Marcos de Arica, Unión Española, Unión La Calera y Unión San Felipe.
Varios de ellos han entrenado presencial. Como Coquimbo, antes del regreso a cuarentena en su región. O Lautaro de Buin, quienes confían en que este 2021 podrán competir en la División de Plata previa aprobación de la ANFP.
La realidad es que la Primera B, en Chile, sigue siendo una división fantasma. ANFP no ha tenido intención de retomar el torneo a la brevedad, y sigue sin ser tema a discutir en los consejos de presidentes. Las directivas han autorizado a varias de sus categorías juveniles a volver a entrenar, pero no así con el fútbol femenino. Esto, con permiso único colectivo, otorgado por Comisaría Virtual.
La cantidad de recursos que se han inyectado en la categoría son nulos, y mientras no se ponga una fecha oficial para el retorno del fútbol, las jugadoras seguirán sin permisos para entrenar en cancha, sin profes haciéndoles clases por Zoom, y abandonadas por parte de la Asociación… un año más.
Foto: Coquimbo Unido Femenino
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