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Geraldine Molina 
Entrenando durante casi dos meses sin tener indumentaria oficial, con nulo interés de la dirigencia del club, y con coordinadores que solo están preocupados por el fútbol joven, en Cobresal Femenino acusan sentirse dejadas de lado y que defienden más a la Selección de Puente Alto que al equipo de El Salvador.
El Club Deportivo Cobresal fue fundado en mayo de 1979, en la ciudad de El Salvador, en la región de Atacama. Hace de local en el estadio El Cobre, ubicado en la comuna de Diego de Almagro, el que es conocido como “el estadio más grande del mundo”, ya que su capacidad máxima (12 mil personas) supera a la población que vive en el campamento minero: 8500 habitantes.
Por esa misma razón es que parece raro, por decir lo menos, que sus categorías juveniles y femeninas hagan de local en Santiago. En el caso de las mujeres, juegan y entrenan en el Complejo Deportivo Amador Donoso, en Puente Alto. Con esa comuna tienen un vínculo más allá: es la Corporación de Deportes puentealtina la que lleva sus destinos.
La relación con Puente Alto
Cobresal decidió, en 2019, volver a tercerizar la rama femenina del equipo. Atendiendo a la exigencia de Conmebol de tener inferiores desde la Sub-15 y una categoría femenina con ciertas características, es que el club nortino decidió “ceder” su nombre e insignia a la Selección de Puente Alto, y dejar a la comuna de la Región Metropolitana a cargo del equipo.
Hasta 2018, las jugadoras jugaban en Pichidegua (región de O’higgins), tercerizadas, y en 2019 fue cuando se mudaron a Santiago. En el sur eran un equipo competitivo, a pesar de que el DT Claudio Fuentes revelara que su presupuesto anual rondaba los 12 millones de pesos en ese entonces. Formaron a varias jugadoras que llegaron a lo más alto, como Camila Pavez, hoy en Lanús.
Aunque se ilusionaban con un mejor futuro en la RM, la llegada a Puente Alto no trajo todo lo bueno que Cobresal Femenino esperaba. Y la relación con el club comenzó a desaparecer de a poco.
Fuentes desde dentro de la institución aseguran que “el equipo femenino es el cacho del club para participar en copas internacionales“, y revelan cómo las jugadoras fueron cayendo en el abandono en el que hoy están sumidas.
La llegada a Puente Alto tuvo relación con el fútbol joven: las inferiores de Cobresal dependían de esa Corporación de Deportes, y al momento de renovar el convenio entre ambas instituciones, la comuna solicitó tener el dominio de la rama femenina. “La realidad es que en Cobresal lo hicieron para que el fútbol joven, que es lo único que les importa, siguiera teniendo un lugar para entrenar y jugar”, detallan.
Ricardo Luna es el nombre del Gerente del Fútbol Joven y Femenino de Cobresal, quien trabaja desde Santiago con el equipo de El Salvador. Jugadoras del plantel confiesan que “los de Comunicaciones son quienes más nos han apoyado. Nosotras no tenemos mayor relación con el club, hemos visto a Luna solo una vez. La capitana se reunió una vez con él, en septiembre 2020, para ver el retorno, pero nada más. Nosotras nos sentimos bien abandonadas, nos sentimos una rama más de Puente Alto que de Cobresal, si no tenemos vínculos con ellos”.
El abandono actual
Cobresal Femenino fue el primer club en volver a los entrenamientos de pretemporada a principios de febrero. Las jugadoras llevan cinco semanas entrenando en el Complejo Deportivo Amador Donoso, que fue reformado en diciembre pasado, como una de las medidas municipales para con el deporte en Puente Alto.
Sin embargo, al revisar las redes sociales oficiales del club, solamente se informa de las pruebas masivas de jugadoras durante febrero. De los entrenamientos, nada. ¿Por qué? Principalmente, porque están todas entrenando con ropa deportiva particular, ya que Cobresal no les ha entregado uniforme de entrenamiento ni de juego.
“A nosotras nos informaron que iban a llegar en la quincena de marzo, pero no estamos entrenando con uniformes porque nos ofrecieron entrenar con los uniformes del año pasado y no alcanzaban para todas. Entonces, el profesor determinó que estuviéramos todas iguales (con ropa deportiva propia) para que ninguna de las niñas nuevas se sintiera mal o incómoda”, explica la jugadora.
¿Qué dicen desde el club? “El contrato con KS7 era para vestir a todas las divisiones y no lo han cumplido porque no tienen telas para fabricarlo. El Primer Equipo aún no tiene camiseta para jugar Copa Sudamericana (jueves 18/3 vs Palestino)“.
La complicada temporada 2021
La relación que tiene Cobresal Femenino con la dirigencia es nula. Tanto, que desde El Salvador han reemplazado a los coordinadores del equipo todos los años. “En los últimos tres años hemos tenido tres coordinadores distintos en la rama femenina. Carlos Cáceres será el encargado exclusivo del femenino en 2021 y él se hará cargo de todo”, detalla una miembro del plantel.
Hoy, la Corporación de Deportes de Puente Alto le facilita durante cuatro días a la semana las canchas del complejo Amador Donoso a la rama femenina de Cobresal, entre 19 y 21 horas. La mayor parte del cuerpo técnico se mantuvo para la temporada 2021, pero sufrieron un éxodo masivo de jugadoras.
“Dentro de todo, es el cuerpo técnico el que nos mantiene en pie. Pese a no ser un equipo de lucas y que tiene poca implementación para entrenar, ellos hacen lo que pueden para darnos entrenamientos de calidad. Hoy estamos trabajando mucho para dar un buen espectáculo cuando comience el campeonato. Tenemos muchas ganas de quedarnos en Primera”, asegura la futbolista.
Además, tuvo palabras de agradecimiento para el cuerpo técnico. “Ellos nos han ayudado mucho, aunque nos han cambiado al DT, la mayoría del cuerpo técnico sigue siendo el mismo. El cuerpo técnico de Cobresal es de la Corporación de Puente Alto, y en realidad no me puedo quejar de esa parte”, declaró.
Un futuro no tan auspicioso…
Cobresal terminó la temporada 2019 en la última posición de la tabla, con 0 puntos en 21 partidos disputados. Recibieron 148 goles y apenas anotaron 13, con una diferencia de goles de -135. En 2020, en tanto, las puentealtinas consiguieron su primer triunfo en Primera División. Ante Deportes La Serena, por 2-1, sumaron sus únicos 3 puntos en el certamen. Zafaron de la última posición del grupo B y quedaron sextas.
Una de las máximas más evidentes en el fútbol femenino tiene relación con el apoyo de los clubes. Mientras más inviertan y más interés pongan en sus futbolistas, más van a rendir en cancha. Cuando los clubes inician sus procesos de profesionalización queda de manifiesto deportivamente que hoy las jugadoras ya pueden dedicarse a ser atletas de alto rendimiento de tiempo completo, y no compatibilizándolo con uno o dos trabajos, con los estudios, y con la vida familiar.
La brecha existente entre el Club Deportivo Cobresal y su categoría femenina es cada día más amplia. A pesar del esfuerzo diario de sus jugadoras, quienes hoy dependen de los fondos que destine Puente Alto a la Corporación de Deportes casi en su totalidad.
Pero mientras no destinen presupuestos de verdad, ni se comprometan a romper con la tercerización, o no les den sueldos decentes a sus jugadoras, se ve muy difícil que puedan comenzar a conseguir resultados y a pelear el título nacional.
Aunque creer sigue estando permitido. Ilusionarse aún es legal. Y las jugadoras de Cobresal sueñan con que, un día, podrán salir de la zona baja de la tabla. Podrán alzar la copa de campeonas. Podrán convertirse en futbolistas profesionales y el club estará orgulloso de apoyar cada fin de semana a dos Primeros Equipos: ese en el que juegan hombres, y aquel en que militan mujeres.
N.d.l.R.: Las personas consultadas solicitaron la aplicación del artículo 7 de la Ley 19.733 sobre libertades de opinión e información y ejercicio del periodismo, para resguardar sus nombres, por temor a las represalias por parte de Cobresal. Como equipo CONTRAGOLPE decidimos aceptar la reserva de las fuentes.
Foto: Cobresal Femenino
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