Antonio Loma-Osorio 
¿A qué nos referimos al hablar de jugadoras todocampistas? Pues, justamente, a eso: hay futbolistas que rinden en todo el campo de juego. Por ejemplo, Francisca Lara volante o lateral, mientras sigue aumentando su leyenda como máxima goleadora de la Selección Chilena…
Poco fútbol tuvimos este fin de semana. Claro, con el tema de las Primarias, era esperable. El torneo se puso al día con un par de duelos pendientes y nuestras seleccionadas cuentan los minutos para el estreno olímpico en el Lejano Oriente.
Hojeando la actualidad futbolística alrededor del orbe, sin embargo, sí hubo algunas cositas entretenidas para analizar. Mientras los medios tradicionales de deportes nos ofrecieron noticiones impactantes del calibre “Alexis Sánchez se cortó el pelo” (lo juro por mi abuelita, ¡búsquenlo!) o “Gabriel Arias explicó por qué usa la camiseta 21” (atentos ahí, numerólogos del mundo), quienes seguimos el futfem estamos al tanto que en Argentina se jugó la gran final del Campeonato de Primera División, en que San Lorenzo derrotó a Boca Juniors en penales y se quedó con el título. ¡Bien por el equipo del Papa Francisco!
En rigor, la final fue el jueves pero arrojó un asunto bastante sabroso para analizar. Boca Juniors ganaba por 1-0 hasta el minuto 43 del segundo tiempo. Con el último aliento, San Lorenzo logró igualar y forzar la definición desde los 12 pasos. El gol del cuadro que a la postre seria campeón lo anotó su centrodelantera Sindy Ramírez… No, momento, la uruguaya nunca fue centrodelantera… Los registros la muestran habitualmente como mediocampista, sin embargo, en los últimos partidos, venía actuando como defensora central. Entonces, para ser precisos, el gol del empate lo anotó la mediocampista, que jugó de central, pero que el entrenador mandó en los últimos 20 minutos a jugar de centrodelantera. Y, ojo, que en la final de 2015 ante UAI Urquiza, la misma Ramírez jugó… ¡de arquera!
En el fútbol practicado por mujeres es habitual la polifuncionalidad de las jugadoras. Todocampistas, se les llama. Algo que, de ocurrir en los equipos de hombres, sería un asunto conducente a los más intrincados análisis científicos de todo tipo. Como muestra: no hay partido de Santiago Wanderers masculino en que no se mencione que algún día el defensor Francisco Alarcón jugó de centrodelantero. Al mismo tiempo, se podría empapelar el Taj Mahal por dentro y por fuera con todos los artículos que se han escrito sobre Gary Medel como central o como volante.
Pero en fin, en las mujeres se da con asombrosa frecuencia y vale la pena echar un vistazo a algunos casos emblemáticos. Por ejemplo, el de la gran Julie Ertz, para muchos la mejor futbolista del mundo. Cuesta concebir un equipo de Estados Unidos sin la “6” (dorsal 8, estrictamente hablando) sosteniendo todo el esquema. Gracias a la labor de Ertz, el tetracampeón del mundo ataca, prácticamente, con siete delanteras, mientras ella maneja el sector medio. Una especialista, ¿cierto? Pues bien, Julie Ertz tuvo su formación e hizo buena parte de su carrera como zaguera central.
En el caso de nuestra selección, hay ejemplos para tirar a la chuña, pero elijamos algunos bien representativos. Daniela Pardo, por ejemplo, a quien el documental Históricas adecuadamente etiquetó como una de las “todocampistas” de La Roja. Si bien el consenso es que rinde muchísimo como volante de contención, no es raro verla en la zaga, cuando faltan Carla Guerrero o Camila Sáez e, incluso, tuvo que ir a la pelea como “9” en el amistoso ante Francia en 2017. Le tocó enfrentar como marcadoras a Laura Georges y Wendie Renard… “Cómo olvidarlo, si eran las tremendas pescaítas”, comentó alguna vez.
El debate en el mundillo del futfem sobre Pancha Lara volante o Pancha Lara lateral izquierda es tan antiguo como la vida misma. El tema de fondo es, en todo caso, que la goleadora histórica de La Roja puede desenvolverse sin problemas en ambas posiciones. Camila Sáez, por su parte, es una defensora central por excelencia, pero que en muchísimos procesos como seleccionada (e incluso habitualmente en el Rayo Vallecano) ha ocupado la plaza por la banda izquierda. Karen Araya, también, se desempeña indistintamente como volante de contención o de creación y en más de alguna ocasión tuvo que actuar de “9”.
La última “sorpresa” mayúscula en este sentido la dio José Letelier en el amistoso último ante Alemania, al ubicar a Nayadet López, el epítome de volante central de nuestra Roja, como lateral por la derecha. La nacida en Manises, Comunidad Valenciana, cumplió con cero faltas, pese a que era una posición novedosa.
En el torneo nacional también vemos instancias sorprendentes. Es difícil imaginar a Ivette Olivares fuera del mediocampo de Palestino. La ex Boston College tiene visión, buena pegada, manejo posicional y, además, hizo todo el recorrido en selecciones menores en ese puesto. Ante Universidad de Chile, sin embargo, en el mejor partido del Campeonato hasta la fecha, Claudio Quintiliani la mandó como líbero, entre las dos defensoras centrales. Tuvo su recompensa la astucia del avezado DT, pues por primera vez en todo el torneo la U no ganó y, de paso, le convirtieron dos goles.
¿Por qué pasa esto? Ahí los filósofos del fútbol y de la vida tendrán sus explicaciones. Quedémonos con el deleite de ver a las jugadoras en distintas dimensiones y ofreciendo talento desde el lugar donde les toque. Ellas asumen los desafíos; nosotros disfrutemos a las todocampistas.
Foto: Comunicaciones ANFP
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